Quienes me seguís por redes sabéis que a mediados de febrero Julieta nos pegó un susto muy grande y tuvieron que operarla urgente de peritonitis.
Yo nunca he sido muy hipocondríaca, ni conmigo misma ni con las niñas. Soy más de las que creen que los dolores de piernas son “porque vas a dar un estirón” y la fiebre un mecanismo del cuerpo para luchar el virus de turno. El centro de salud lo visitamos para poner las vacunas, y lo de ir a urgencias intentamos evitarlo lo máximo posible.
Y ¿por qué os cuento esto? pues porque la operación de Julieta no me hizo más asustadiza con estos temas pero sí me tiene más alerta a la mínima y si me dice que le duele la tripa o le sube un poco la fiebre me preocupo un poco más que antes.
El martes por la tarde justo empezó con unas décimas que le duraron toda la noche y parte del día siguiente, y unas horas más tarde comenzó a quejarse de la tripita. Como la fiebre no estaba muy alta ni el dolor era muy agudo, decidí usar el comodín de la llamada antes de ir a Urgencias y utilicé por primera vez el servicio de VIDA, una app de consultas médicas por videoconferencia que había conocido unos semanas antes.
VIDA es una app que aterrizó en España en febrero de este año pero que en países como Noruega o Suecia forma parte de el servicio nacional de salud. Su principal objetivo es aclarar consultas médicas de los usuarios y ayudar a descongestionar el sistema público.
Cuando entras en la aplicación te pide los datos, los datos del paciente, que describas los síntomas, e incluso puedes subir fotos por ejemplo si tienes un sarpullido. Pasado este proceso aparecen los médicos disponibles para atender tu consulta y en cuanto tiempo podrán atenderte, aunque también puedes programar la videollamada y que te contacten a una hora concreta.
A nosotras nos atendió Verónica, quien nos recomendó pedir cita en el hospital en el que operaron a Julieta para descartar que se hubieran formado posibles adherencias tras la operación y fueran las causantes de las molestias en la tripa.
Estuvimos hablando un poco de los antecedentes de la peque, y lo cierto es que fue muy tranquilizador tener un opinión profesional tan a mano, sin moverse de casa, y sin tener que esperar horas en el centro de salud o Urgencias.
La primera consulta es gratuita por si queréis probarla, y las siguientes son 20€, que me parece un precio más que justo para quedarnos tranquilas en un momento dado, no sólo con respecto a los niños sino también con nosotras mismas, que somos las primeras que nos tenemos que cuidar!
Si tenéis cuenta de Instagram podéis ver en varios vídeos en mi Stories sobre cómo fue la videoconsulta 🙂
Feliz fin de semana!
*Post en colaboración con VIDA. Gracias por ayudar a que este blog siga creciendo!