La tercera vez que Martina me repitió lo mucho que le apetecía hacer algo las dos «sin Julieta» en a penas una semana, puse una gran nota en la agenda y decidí que el próximo sábado sería para nosotras.
Empezamos con el musical de La Cenicienta, en el Teatro Nuevo Apolo, que disfrutamos muchísimo las dos (toda una sorpresa!). Paseamos un rato por el centro y aprovechamos para ver el mercadillo de Plaza Mayor que ya estaba montado y estaba lo suficientemente despejado como para poder verlo bien.
Seguimos recorriendo Madrid mientras nos disfrutábamos en exclusiva y yo aprovechaba para hablar con ella de las mil cosas de las que no nos da tiempo a hablar en el día a día, y maravillándome de la pequeña gran persona que es.
Comimos en The Place, en la calle Noviciado, uno de los restaurantes incluidos en la guía foodiekids de Mammaproof, un pequeño café con una gran mesa comunal perfecta para sentarse, descansar un rato, comer algo rico y probar uno de los mejores brownies de la ciudad! lo atacamos con tal voracidad que no me dio tiempo ni a sacar foto 😉
Cuando salimos estábamos ya algo cansadas, pero aprovechando que lo teníamos de camino a casa, decidimos hacer una última parada en «Slow Revolution», el mercado navideño organizado por Federica & co que no puedes perderte.
Allí conocimos a Ziortza de Zirimola, una tienda multimarca con un montón de productos geniales para peques. Los divertidos y coloridos calcetines Hop Socks, 100% hechos en España y con unos estampados preciosos. También pusimos cara y voz a Ana de Mimosa y Estraza, una tienda online con una selección muy especial de regalos en la que seguro encuentras el detalle perfecto para estas navidades, y justo al lado las chicas de Kolonaki, una marca de ropa de mujer que he descubierto hace poco con un estilo único que no deja indiferente. Y por fin pude ver en directo la ropa de cama de Bandide para peques, de estampados nórdicos y muy originales. Ahora sólo falta que las peques se independicen de la «habitación de todos» 😉
La parte central del «market» es un zona preciosa para tomar algo que no puede ser más navideña. Cada mesa tenía flores y centros con velas que invitaban a sentarse, tomar un té con canela poner el broche a una tarde de compras muy especial, pero en la que además puedes disfrutar de varios talleres como el que «Fábrica de Texturas» estaba a punto de dar sobre estampación en madera y al que me hubiera encantado quedarme.
Salimos justo a tiempo para ver como se encendían las luces navideñas que hacen que en esta época Madrid esté más bonita que nunca y fue el broche a un día fantástico las dos solas, «de chicas mayores» que tanta falta nos hace de vez en cuando…
Después de este fin de semana yo ya estoy en modo navideño ON, buscando ideas sobre cómo decorar la mesa de nochebuena este año, o como envolver los paquetes… creo que cada año me gusta más, sobretodo por la ilusión contagiosa de cierta personita que se pasa tooodo el año preguntando cuándo es Navidad. Ya pronto pequeña, ya no queda nada.
