Vuelve el fresquito y nos falta tiempo para volver a ir de ruta por Madrid y descubrir lugares fantásticos para visitar en familia.
Nuestro último plan fue en el Barrio de La Latina, más conocido por sus terrazas de tapeo y sus bares de copas quizá, pero con algún tesoro escondido apto para todos los públicos.
La primera parada fue en el Teatro Off, en el que las niñas y yo estuvimos viendo el espectáculo “1, 2, 3 Magia!” de Javi Rulfo, que no puedo dejar de recomendaros.
Javi conecta con el público infantil desde el minuto uno, pero los adultos no paramos de reír durante la hora y media de función.
Una combinación magistral de magia y humor que nos encantó a todos y que deja con la boca abierta continuamente.
El Teatro Off además tiene una programación familiar muy variada y su espacio es súper acogedor. Apuntadlo porque merece y mucho la pena!
Cuando salimos ya era la hora de comer y a la vuelta del teatro teníamos Viva Burguer, una hamburguesería vegana que tenía muchas ganas de probar y que no nos defraudó. Yo me pedí una tosta de setas que estaba realmente deliciosa y las peques una hamburguesa y un plato de pasta con soja del menú infantil.
La comida estaba buenísima pero las cantidades del menú infantil eran bastante grandes, así que tenedlo en cuenta. A nosotras nadie nos avisó o recomendó que pidiéramos menos y sobró comida (por otro lado, y aunque puede que fuera un día puntual, los camareros no fueron nada amables).
A pesar de este detalle, muy recomendable ir, además su comida también es apta para celiacos, y sé que muchas familias lo pasáis regular encontrando sitios gluten free para comer.
Al lado del restaurante está Cocool, una preciosa tienda de objetos tradicionales que merece la pena una mini visita. No pude hacer muchas fotos porque iba sola con las peques, pero si queréis conocerla más a fondo tenéis un post enterito en el blog de mi colega y amiga Belén.
Y después de comer., qué mejor que dar paseo por un jardín secreto y jugar a princesas y hadas? En plena plaza de la Paja se encuentra el Jardín del Palacio del Príncipe de Anglona, uno de los pocos jardines nobiliarios del XVIII que se conservan en la capital.
Desde mi humilde opinión está peor conservado de lo que merece, pero es un pequeño oasis en medio de la ciudad que definitivamente no puedes perderte si estás por la zona.
¡Os deseo un feliz fin de semana!
Las peques van vestidas de Kokori Kids, con botas de Clotaire.
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