Julieta, Juliet, July, #sweetjulieta, pequeñita, terremoto, mi niña soñada… hoy cumples 2. Esos dos que llevas diciendo meses que ya tienes (no quieras crecer tan rápido, por favor, bebita mía), ya están aquí, ya es día 20.
Cada día de estos dos años a tu lado han sido un regalo, mi amor. Un regalo disfrutar de tu embarazo tranquilo y confiado. Un regalo tu nacimiento/mi parto en el calor de nuestra casa, en el calor de nuestra cama. Un regalo tu primera mirada, atravesándome, llegándome muy dentro, como si supieras las respuestas a todas mis preguntas…
… y a veces creo que las tienes, pequeña, porque tu actitud ante la vida me deja claro que sabes mucho más que yo de ella, y que he tenido la suerte de que me elijas para aprender de ti y de la alegría contagiosa que has traído contigo.
Han sido dos años preciosos, Julieta, y me siento tremendamente afortunada a pesar del cansancio y las rutinas, a pesar de la vida que a veces no nos deja disfrutarnos tanto como nos gustaría, a pesar de todas las cosas menos buenas que han pasado, estos dos años viéndote crecer cada día ha sido lo más gratificante que me ha pasado nunca, un regalo muy grande que voy a agradecer y recordar siempre…
Y aunque una parte de mi quiera guardarte para siempre así, entre bebé y niña, muero de ganas por verte crecer, por oírte hablar (más), por sacar ratitos juntas y a solas igual que hago con tu hermana, y marcharnos «de chicas»… de los 2 a los 3 dejarás de ser un poco mi bebé, y empezarás a ser un poco niña, y ¿sabes qué? tengo entradas en primera fila para no dejar de observarte, y no perderme ni un sólo momento de este nuevo año que te espera.
Feliz cumpleaños mi dulce Julieta, tus dos van a estar llenos de maravillas por descubrir y momentos que atesorar, y te prometo que voy a estar ahí acompañando cada uno de tus pasos, y sacándote muchas muchas fotos para contarte cuando crezcas todo lo bonito que viviste.
Te queremos muchísimo pequeñita.